Muchas grandes marcas y empresas han optado en los últimos años por poner en marcha campañas de marketing viral. Se trata de una técnica de marketing basada en el boca oreja. Es decir, a través de las redes sociales y otros medios electrónicos la gente se pasa y comparte contenidos comerciales que encuentra divertidos e interesantes. De esta forma, se crea un crecimiento exponencial en la exposición de dicho mensaje.
La proliferación del marketing viral sigue siendo una tendencia en aumento a pesar de los argumentos generados sobre su poca validez y eficacia. Éstos giran entorno a la dificultad de saber con precisión si la puesta en marcha de una campaña de marketing viral conseguirá el impacto deseado o cumplirá los objetivos para los cuales ha sido creada. Si bien es cierto que muchas de estas campañas han logrado una fama y reconocimiento merecido, muchas otras han sido olvidadas o han pasado desapercibidas por no ser capaces de generar la suficiente atención e impacto.
Pero el principal problema de este tipo de marketing es saber la verdadera autoría del anuncio. Incluso, la mayoría de veces no se sabe cual es el producto o servicio que se anuncia. Esto es debido al grado alto de imaginación al que recurren este tipo de mensajes para resultar atractivos y contagiosos para el usuario.
Claros ejemplos son los siguientes vídeos:
- Campaña “Llévate un coche por 13.000 pepinos o pavos”
- “Keloflipas” de Port Aventura
- “Surf extremo” de Quicksilver
- Campaña de conZumo.com
Es necesario aclarar, sin embargo, que, pese a los inconvenientes que pueden surgir, el marketing viral ayuda a conseguir gran cantidad de posibles clientes a un bajo coste.
La proliferación del marketing viral sigue siendo una tendencia en aumento a pesar de los argumentos generados sobre su poca validez y eficacia. Éstos giran entorno a la dificultad de saber con precisión si la puesta en marcha de una campaña de marketing viral conseguirá el impacto deseado o cumplirá los objetivos para los cuales ha sido creada. Si bien es cierto que muchas de estas campañas han logrado una fama y reconocimiento merecido, muchas otras han sido olvidadas o han pasado desapercibidas por no ser capaces de generar la suficiente atención e impacto.
Pero el principal problema de este tipo de marketing es saber la verdadera autoría del anuncio. Incluso, la mayoría de veces no se sabe cual es el producto o servicio que se anuncia. Esto es debido al grado alto de imaginación al que recurren este tipo de mensajes para resultar atractivos y contagiosos para el usuario.
Claros ejemplos son los siguientes vídeos:
- Campaña “Llévate un coche por 13.000 pepinos o pavos”
- “Keloflipas” de Port Aventura
- “Surf extremo” de Quicksilver
- Campaña de conZumo.com
Es necesario aclarar, sin embargo, que, pese a los inconvenientes que pueden surgir, el marketing viral ayuda a conseguir gran cantidad de posibles clientes a un bajo coste.
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